Como condicionan los microorganismos el desarrollo de la raíz
Los hongos micorrícicos proveen una vasta red de filamentos fúngicos que pueden incrementar el área de absorción original de la raíz. Sin embargo, los protozoos tienen un impacto diferente. Son los principales arquitectos de la estructura y el desarrollo de las raíces, creando mucho más ramificaciones y área de superficie, particularmente en gramíneas (pastos cereales y caña de azúcar).
La planta libera constantemente exudados a base de glucosa para estimular la vida del suelo, y gracias a esto, hay muchos más microorganismos en la zona de la raíz (rizósfera) que en el suelo circundante. Los microbívoros, como los protozoos, que se alimentan de estos microorganismos también prosperan en gran cantidad. Hay 30 veces más protozoos en la zona circundante a la raíz, que los que se encuentran en el suelo donde no hay raíces a solo unos centímetros de distancia.
De los tres miembros principales de la familia de los protozoos, los flagelados son los más pequeños y se impulsan agitando sus colas en forma de látigo llamadas flagelos, para moverse en la solución del suelo. Las amibas les siguen en tamaño y se mueven vertiendo su cuerpo en estructuras en forma de patas llamadas seudópodos. Los ciliados son los más grandes del grupo y se desplazan en la solución del suelo a través del movimiento de múltiples filamentos cortos llamados cilios que se encuentran en la superficie de sus membranas, esto les permite perseguir a sus presas, o huir de sus depredadores.
Hay técnicas de señalización utilizadas tanto por los microorganismos benéficos como por los patógenos, por ejemplo, los nematodos formadores de agallas, estimulan a las plantas a formar en las raíces este tipo de estructuras en las cuales se albergan; mientras que las bacterias fijadoras de nitrógeno las inducen a formar los nódulos en los que habitan.
Los protozoos también utilizan estas estrategias de comunicación, estimulando a las raíces de tres formas:
- Pueden liberar auxinas, que son hormonas reconocidas por su capacidad de impulsar a las raíces y las hojas. Específicamente la ameba promueve una respuesta de mejora en las raíces.
- Mediante el consumo constante de bacterias (“pastoreo”), los protozoos las incitan a producir y liberar auxinas como respuesta. En consecuencia, las raíces más grandes producen una mayor cantidad de exudados, lo que beneficia tanto a las bacterias como a los protozoos (que son sus depredadores), y el cultivo prospera.
- Finalmente, el “pastoreo” que realizan los protozoos también induce a las bacterias nitrificantes a producir los nitratos necesarios para ayudar a alcanzar la deseable relación de resistencia Amonio/Nitrato de 3:1; a su vez, los nitratos actúan como una señal para el alargamiento lateral de la raíz. Por otra parte, estos importantes organismos reciclan el Nitrógeno amoniacal contenido en las bacterias que consumen, asimismo, estimulan a los organismos fijadores de Nitrógeno a proveer un suministro adicional de este tipo de Nitrógeno a partir de la atmosfera.
Diez puntos clave acerca de los Protozoos
- Los flagelados dominan los suelos más secos y menos perturbados, mientras que los ciliados se multiplican en suelos cultivados, de regadío y con alto contenido de bacterias.
- Los suelos pueden tener un gran número de protozoos o nematodos consumidores de bacterias, pero no ambos, ya que compiten por la misma fuente de alimento.
- Los protozoos pueden acelerar la descomposición de la materia orgánica al promover la actividad bacteriana.
- La preparación de un té de protozoos* se puede mejorar si se alimentan con bacterias, esto es, agregar un té bacteriano al té de alfalfa (rico en protozoos), el primer día del proceso de preparación. Los protozoos se duplican cada dos horas cuando se les proporcionan bacterias.
- Los protozoos se alimentan selectivamente de bacterias y de esta manera, tienen un gran impacto en la composición de la biomasa bacteriana. Este impacto parece ser muy deseable, por lo que puede haber un gran beneficio al restaurar las poblaciones de protozoos.
- Un suelo que contiene cantidades inusualmente altas de ciliados a menudo es compacto y anaeróbico. En este caso, el uso de yeso y ácido húmico, puede mejorar tanto la estructura del suelo como el equilibrio de los protozoos.
- Si un suelo alberga grandes cantidades de algas visibles en la superficie, esto puede ser un indicador de una falta de protozoos.
- Los protozoos pueden consumir organismos fitopatógenos (bacterias y hongos). Son un componente protector, frecuentemente no reconocido, de un ecosistema del suelo que funciona adecuadamente.
- Los protozoos son el alimento favorito de las lombrices de tierra. Cuando se repuebla el suelo con un té de protozoos, éstas incrementan su población. Las lombrices descomponen la materia orgánica en forma cuatro veces más eficiente que el compostaje estándar. Sus excretas son un fertilizante natural incomparable. Aportan Calcio al suelo, por medio de glándulas que producen Carbonato de Calcio. Asimismo, airean el suelo, favorecen la formación de agregados, lo remineralizan, e incuban una gama única de bacterias benéficas en su intestino a las que no se puede tener acceso en ninguna otra parte.
- Los protozoos también son una fuente importante de alimento para nematodos y microartrópodos benéficos. Este tipo de nematodos son importantes para el reciclaje de minerales, mientras que los artrópodos microscópicos trituran la materia orgánica a un tamaño de partícula más manejable para que las bacterias y los hongos la descompongan. La red alimentaria del suelo funciona para proveer nutrientes y suprimir enfermedades sólo cuando todos los integrantes de la cadena alimentaria están presentes
*la elaboración de un té de protozoos. es una estrategia simple y altamente efectiva que podría beneficiarnos considerablemente y el equipo requerido es básico y económico. La alfalfa orgánica seca es el inoculo inicial y está saturado de las tres formas de protozoos porque tiene un componente de nitrógeno muy alto. El compost perfecto tiene una relación Carbono/Nitrógeno de 30:1. La alfalfa seca también tiene una relación C: N de 30: |
En Conclusión:
En general, la biología del suelo ha sido ignorada durante décadas de realizar una agricultura de extracción basada en la química. Es primordial reconocer la gran complejidad y productividad de los ecosistemas microbianos en el suelo; no podemos seguir ignorando el mundo que existe bajo nuestros pies, porque esto afecta directamente nuestra capacidad de producción, nuestra rentabilidad, nuestra salud y la viabilidad de nuestro planeta.
Los protozoos son parte importante de esta biología y, si podemos garantizar su proliferación, optimizamos el ciclo de nutrientes, el manejo del Nitrógeno, la sanidad de las raíces, la actividad de las lombrices de tierra y el control de las enfermedades en nuestros cultivos.