COMO MANEJAR LOS ESTIMULANTES MICROBIANOS

Parte 8

Criterios para posicionar los bioestimulantes en un sistema agrícola

Las enzimas son como una llave española, en el sentido de que cada enizma solo puede desencadenar una reacción especifica.

Al igual que una llave española una enzima solo puede ajustarse correctamente a una tuerca o perno de un tamaño especifico, y de la misma manera que con una llave española se puede apretar cientos de miles de tuercas, una enzima puede realizar el mismo trabajo una y otra vez sin agotarse.

Esto es importante porque es la base de las diferencias entre la capacidad digestiva de un insecto versus la capacidad digestiva de un ser humano o un animal. Sabemos que los animales, los insectos y las personas tienen sistemas digestivos muy diferentes con enzimas digestivas muy diferentes. Si comparamos nuestro sistema digestivo con el de un rumiante, por ejemplo, una vaca lechera, las vacas lecheras pueden descomponer y digerir celulosa porque tienen la enzima celulasa en su sistema digestivo. Nosostros no tenemos esa enzima, por lo que no podemos consumir heno y forrajes y obtener energía a partir de ellos, sin embargo, las vacas si pueden hacerlo.

Esta también es la diferencia fundamental entre nuestro sistema digestivo y el sistema digestivo de algunos insectos. Muchas de las larvas de insectos no tienen las enzimas digestivas necesarias para descomponer proteínas completas, por lo que no pueden digerir plantas que las contienen, de la misma manera que nosotros no podemos digerir la celulosa.

Por otro lado, parte del trabajo de investigación que fue realizado originalmente por Phillip Callahan en la Universidad de Florida Gainesville sobre los sistemas de comunicación de plantas e insectos, lo podemos resumir de una manera muy simple y esta es que los insectos se comunican en el espectro infrarrojo con las plantas y con el entorno que los rodea.

Las plantas no sanas, particularmente las que tienen altas concentraciones de amonio, sirven como una resplandor para atraer a los insectos plaga, ya que curiosamente el amonio es un emisor y un amplificador de señal infrarroja.

Dependiendo de la humedad y la temperatura Philip identificó qué los insectos pueden detectar las plantas no sanas a una distancia de 1400 a 1700 yardas, es decir pueden ver plantas enfermas a casi una milla, y lo que describió es muy simple: Cuando en campo hay plantas que están creciendo adecuadamente sin enfermedades obvias ni insectos presentes, lo que nosotros vemos es una planta sana de color verde (imagen 1), mientras que los insectos plaga no ven nada. Digamos que en su pantalla de radar no pueden detectar nada en el espectro infrarrojo.

Sin embargo, cuando tenemos plantas enfermas en las que hay insectos plaga y altas concentraciones de amonio, esto es lo que nosotros vemos:

Y esto es lo que ven los insectos:

Parafraseando lo que Philip mencionó en uno de sus libros, el dijo que en el espectro infrarrojo las plantas no sanas aparecen ante los insectos como una luz de neón sobre un fondo oscuro, es decir se ven muy intensamente. Este es uno de los problemas con el uso de insecticidas, ya que podemos aplicar un insecticida convencional y eliminar una plaga potencial en campo, pero mientras no abordemos la causa subyacente del porque ese insecto fue atraído a ese lugar, podremos eliminar el insecto, pero aun tenemos ese letrero de luz neón.

En otras palabras, tenemos que cambiar lo que está sucediendo en la fisiología de la planta desde una perspectiva esencial, para realmente resolver el problema de presencia de plagas desde una perspectiva a largo plazo.

La siguiente imagen corresponde a la parte inferior de una hoja de tomate con un aumento de 4000X, que muestra todos los tricomas que están vibrando a una velocidad de 26 a 36 megahertz. Estos son receptores de fotones y también se comunican activamente con el medio ambiente en el espectro electromagnético.

La imagen a continuación es la parte del cuerpo de un insecto a la que sorprendentemente llamamos antenas:

y la principal diferencia entre la antena del insecto y la siguiente antena es la longitud de onda que captan, pero ambas están comunicando en el espectro electromagnético:

Ahora bien, cuando tomamos la antena de la mariposa nocturna y la ponemos al microscopio, asi es como se ve:

Y si ahora tomamos uno de los pelos mas pequeños que se ven en la imagen anterior, lo ponemos al microscopio y lo amplificamos aun mas, esto es lo que se ve:

Es verdaderamente impresionante, porque ciertamente tenemos casi una geometría fractal en la que vemos una antena superpuesta sobre la parte superior de otra antena. Y si observamos esta imagen muy de cerca podemos ver pelos todavía mas pequeños que también están sobre la superficie de esta antena.  Es una imagen bastante detallada e interesante.

Referencia: How to Manage Microbial Bioestimulants” Webinar by John Kempf. Advancing Eco Agriculture

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